¿Por qué optar por un cheesecake sin azúcar y sin horno?
El cheesecake sin azúcar y sin horno se presenta como una deliciosa alternativa para aquellos que quieran disfrutar de un postre sin renunciar a su cuidado alimenticio. Este pastel de queso ofrece múltiples beneficios y oportunidades para experimentar en la cocina.
Beneficios para la salud
Reducida cantidad de azúcares
Está de sobra dicho que el consumo excesivo de azúcar puede ser perjudicial para la salud, de ahí que una de las principales ventajas de este cheesecake sea su baja cantidad de azúcares. Al no contener azúcar, es un postre particularmente idóneo para las personas que sufren de diabetes o que simplemente deseen reducir su ingesta de dulces refinados sin sacrificar el sabor y el disfrute de un buen postre.
Facilidad de preparación
No necesita horno
La segunda ventaja de este cheesecake es que no requiere horno. El no necesitar horno simplifica enormemente el proceso de preparación y lo hace más accesible a personas sin experiencia en repostería o para quienes no disponen de un horno en su cocina. También resulta una alternativa menos calurosa durante el verano, reduciendo el uso de electrodomésticos que generan calor y, por ende, disminuyendo gasto energético.
Ingredientes necesarios para tu cheesecake sin horno y sin azúcar
En el mundo de la repostería no hace falta ser un genio para crear platos que son tanto deliciosos como saludables. Uno de estos postres incluye el cheesecake sin horno y sin azúcar, un delicioso y dulce manjar que puede ser disfrutado sin remordimientos. Aquí presentamos los ingredientes necesarios para prepararlo en casa con facilidad.
Ingredientes para la base
Los ingredientes para la base de tu cheesecake incluyen:
- 200 gramos de nueces, que servirán como base saludable y deliciosa para tu pastel,
- Una cucharada de canela, que aporta un gran sabor y aroma a tu pastel
- 80 gramos de mantequilla sin sal, la cual ayuda a mantener los ingredientes de la base juntos.
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Ingredientes para el relleno
Una vez terminada la base, ahora toca hablar del relleno. Los ingredientes necesarios incluyen:
- 600 gramos de queso crema light, lo que da al cheesecake su sabor característico,
- El zumo de medio limón, ya que aporta frescura al conjunto,
- Un sobre de gelatina sin sabor ni azúcar, para darle consistencia al cheesecake sin añadir calorías innecesarias,
- 4 cucharadas de edulcorante para aportar dulzor sin añadir azúcar procesado.
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Con estos ingredientes en mano, estás listo para comenzar la preparación de tu delicioso cheesecake sin horno y sin azúcar. Recuerda que lo más importante es disfrutar del proceso de creación y finalmente, de cada bocado de este magnífico postre.
Paso a paso: Cómo hacer cheesecake sin horno y sin azúcar
¿Quién dice que no puedes disfrutar de un delicioso postre sin tener que sacrificar tu dieta o tu salud? En este pasado a paso, te enseñaremos cómo hacer cheesecake sin horno y sin azúcar, un postre sabroso y saludable que seguramente te encantará.
Ingredientes
- 2 tazas de queso crema bajo en grasa
- 1 taza de yogurt griego sin azúcar
- 1/2 taza de edulcorante natural (stevia o eritritol)
- 2 cucharaditas de extracto de vainilla
- 1/2 taza de puré de manzana sin azúcar
- 2/3 taza de galletas de avena sin azúcar, trituradas
- 1/4 taza de mantequilla derretida sin sal
Ahora que tenemos todos nuestros ingredientes, vamos a hablarte de los paso a paso para crear este delicioso cheesecake sin horno y sin azúcar. Primero, prepararemos la base de nuestro cheesecake. Combine las galletas trituradas y la mantequilla derretida y presione esta mezcla en el fondo de una bandeja. Asegúrate de presionar la mezcla firmemente para que se pegue y forme una base sólida para nuestro cheesecake.
Preparación del relleno
Luego, en un tazón grande, mezcla el queso crema, el yogur griego, el edulcorante, el extracto de vainilla y el puré de manzana hasta obtener una mezcla suave y cremosa. Una vez que la mezcla esté bien hecha, viértala sobre la base de galletas que preparamos anteriormente. La clave aquí es verter la mezcla lentamente y asegurarte de que la base esté completamente cubierta.
Consejos y variaciones del cheesecake sin horno y sin azúcar
El cheesecake sin horno y sin azúcar ha sido la salvación de muchos amantes de los postres que desean cuidar su salud. Es un postre fácil de preparar y muy versátil, debido a que acepta una gran variedad de ingredientes y técnicas. Para obtener siempre un cheesecake perfecto, recuerda siempre tener los ingredientes a temperatura ambiente antes de comenzar.
Para la base de este delicioso postre, puedes optar por diferentes opciones según tu método de alimentación. Para aquellos que llevan una dieta baja en carbohidratos, las almendras molidas pueden ser una excelente opción. Mientras que para los veganos, una base de dátiles y nueces será del agrado. No tengas miedo de experimentar con las bases, podrías encontrar nuevas combinaciones que te encanten.
Variaciones del cheesecake sin horno y sin azúcar
El sabor del cheesecake tradicional es único y delicioso, pero ¿por qué no aventurarte y probar nuevos sabores? Para los amantes de los cítricos, añadir ralladura de limón o de naranja a la mezcla puede resultar una maravillosa sorpresa. Si eres de los que prefiere los sabores más tropicales, puedes probar agregando puré de mango o de maracuyá.
Además, puedes cambiar la presentación y forma de tu cheesecake. Puedes hacerlos en pequeñas porciones individuales en vasitos. Otra opción es preparar un cheesecake deconstruido, es decir, en vez de montarlo, sirves todos los ingredientes por separado y cada uno se sirve a su gusto. No olvides que lo más importante es disfrutar del proceso y de cada bocado de tu cheesecake sin horno y sin azúcar.
Cómo guardar y servir tu cheesecake sin azúcar y sin horno
Preparar un cheesecake sin azúcar y sin horno puede ser toda una proeza. Pero aún más importante es saber cómo guardarlo para que mantenga su consistencia y sabor. Primero, deja enfriar totalmente el cheesecake a temperatura ambiente. Introducirlo caliente en el refrigerador causaría condensación, lo que no es recomendable para su conservación.
Para guardar tu cheesecake, colócalo en un plato hondo o mejor aún, en un recipiente con tapa. Envuélvelo bien con plástico de cocina, asegurándote de que el envoltorio está bien adherido a los lados del pastel. Luego, refrigéralo. La temperatura ideal para conservar un cheesecake en perfectas condiciones es de 4°C (40°F) y deberías dejarlo enfriar al menos 4 horas, aunque lo ideal sería dejarlo de un día para otro.
Servir el cheesecake sin azúcar y sin horno
A la hora de servir nuestro cheesecake, existen algunos trucos que asegurarán que cada porción se vea y sepa a la perfección. En primer lugar, asegúrate de calentar el cuchillo que vayas a usar para cortar el pastel. Esto permitirá que el cuchillo se deslice fácilmente a través del pastel sin romperlo. Simplemente coloca la hoja del cuchillo bajo agua caliente por un par de minutos y luego límpiala antes de usarla.
Otra recomendación es respetar el tiempo de refrigerado antes de proveer el cheesecake. Si se sirve cuando aún está demasiado blando, puede desmoronarse y no se mantendrá la forma deseada. Por último, para darle un toque final, puedes decorar cada porción con un poco de crema batida sin azúcar o frutas frescas del gusto del comensal.
Administrador y redactor de El mundo del azúcar. Farmacéutico y enfermero y aprendiz de cocinero en ratos libres